1. Mío Cid y su estructura
EL
POEMA DEL CID
El
códice del Poema del Cid contiene 3730 versos y está incompleto.
Y no existe unanimidad en cuanto a la fecha ni a su autoría. Parece
que fue un tal Per Abbat el copista del manuscrito. Parece que hay
dos autores: un poeta de San Esteban de Gormaz y otro que lo
refundió, un poeta de Medinaceli. Sobre la fecha se supone que
entre 2101 y 1207
ESTRUCTURA
La
obra se divide en tres partes o cantares:
-Cantar
del destierro: EL Cid parte de Vivar acompañado por sus tropas,
camino del destierro al que le ha condenado el rey ALfons VI.Pasa por
Burgos, se despide de su mujer, Doña Jimena, y de sus hijas, Elvira
y Sol en el monasterio de San Pedro de Cardeña y se acerca a
Valencia, enviando parte del botín de sus batallas al rey
-Cantar
de las bodas : El Cid conquista Valencia, se reencuentra con su
familia, combate contra el rey Yusuf, se reconcilia con el rey y
accede receloso a que sus hijas se casen con los infantes de Carrión
-Cantar
de la afrenta de Corpes: EL Cid pone al descubierto la cobardía de
sus yernos. Estos, para vengarse del Cid parte con las hijas del Cid,
las azotan y las dejan abandonadas en el robledal de Corpes. Los
infantes son juzgados y vencidos por los vasallos del Cid. Esta parte
se cierra con un canto a la honra y gloria del héroe, que antes de
morir ve restituido su honor con la boda de sus hijas con los
herederos de los tronos de Aragón y Navarra.
TEMAS
Los
temas son el destierro injusto, el deshonor y la recuperación de la
honra. Además hay que considerar la religiosidad del héroe, esposo
y padre ideal. Otros temas:
- El amor familiar, son numerosas las ocasiones en que el héroe echa de menos a su familia y lucha para reunirla y cuidar de su bienestar.
- El respeto a las leyes tanto las divinas como las humanas.
- La propaganda de la guerra como medio de ascenso social. En el poema son constantes las referencias a las cantidades de dinero y otras riquezas que conseguía el ejército del Cid cada vez que derrotaban a sus enemigos.
2. Jorge Manrique
3. Estructura Coplas de la muerte de su padre.
4. La Celestina
TEATRO DEL SIGLO XV: LA CELESTINA
3.1. Ediciones
La Celestina se publicó en 1499, anónima,
con el título de Comedia de Calisto y Melibea y con solo
16 actos o capítulos. Al año siguiente se publica una nueva edición con el
nombre de su autor, Fernando de Rojas, y en 1502 apareció nuevamente con
algunas modificaciones: se le añadieron cinco actos más y un prólogo, el texto
sufrió algunos cambios y adoptó un nuevo título (Tragicomedia de
Calisto y Melibea). Pero la fuerza de Celestina como personaje
central de la obra, hizo que las siguientes ediciones cambiaran el título
inicial por el de La Celestina.
3.2. Autor: Fernando de Rojas
Según nos dice él mismo (Fernando de
Rojas) en el prólogo de la obra, nació La Puebla de Montalbán (Toledo),
hacia 1475. Estudió leyes en Salamanca y fue alcalde de Talavera de la Reina
(Toledo). Procedía de una familia de judíos conversos, lo cual podría explicar
la visión desengañada de la vida que nos revela en su obra. Al parecer, murió
en Talavera de la Reina, en 1541.
3.3. Género literario
Existen muchas teorías entorno al género de La Celestina:
1) En primer lugar, tenemos a los que opinan que se trata de una obra de teatro debido a que es dialogada.
2) En segundo lugar, tenemos a aquellos que opinan que se trata de una novela debido a que es difícil su representación debido a su larga extensión y la variedad de los lugares en los que sucede la acción.
3) En tercer lugar, están los que opinan
que se encuentra a medio camino entre una obra de teatro y una novela.
La consideran una novela dialogada.
4) En cuarto lugar, hay estudiosos que la incluyen entre la comedia humanística
(subgénero teatral procedente de Italia y destinado exclusivamente a la
lectura; a una lectura dramatizada por parte de personas cultas.
3.4. Argumento
Calisto,
un muchacho de noble familia, entra accidentalmente en una huerta persiguiendo
a un halcón y allí ve a Melibea, una joven de la que queda inmediatamente
enamorado sin que ella le corresponda. Calisto vuelve a su casa y le cuenta a
su criado Sempronio lo que le ha pasado. El criado le propone acudir a la vieja
Celestina para que actúe como intermediaria con Melibea. Pármeno, criado fiel
de Calisto, trata de ver a su amo cómo es realmente Celestina, pero al verse
despreciado, se une a Sempronio y a la vieja alcahueta. Los criados de Calisto,
Sempronio y Pármeno, se ponen de acuerdo con Celestina para repartirse el oro
que Calisto dará a Celestina para conseguirle el amor de Melibea.
La astuta
Celestina va a casa de Melibea, fingiendo que es una vendedora ambulante,y,
mediante su capacidad de persuasión (hablándole de Calisto) y un conjuro,
consigue una cita entre los dos.
En premio
a su labor, Calisto le regala una cadena de oro que ella se niega a compartir
con Pármeno y Sempronio; estos la matan y después son ajusticiados. Elicia y
Areúsa (prostitutas y parejas de Pármeno y Sempronio) desean vengarse de
Calisto y buscan a Centurio para que lleve a cabo esa venganza.
En el
primer encuentro entre Calisto y Melibea, los criados de este, Tristán y Sosia,
espantan a los enviados de Centurio. Calisto, preocupado por los ruidos, acude
ver qué sucede, tropieza y muere al caer desde lo más alto de la tapia del
jardín de Melibea. Melibea se lamenta por la breve duración de su amor y se
suicida tirándose desde lo alto de la torre de su casa. La obra termina con el
planto de su padre, Pleberio, quien expresa su dolor por todo lo ocurrido.
3.5. Personajes
En
esta obra, Rojas consigue dar vida a cada uno de sus personajes. Los personajes
de la Celestina pertenecen a dos mundos distintos (clases altas y bajas) que se
relacionan entre sí (relaciones sociales: criados-señores; relaciones
individuales; relaciones amorosas; relaciones económicas) y presentan numerosas
situaciones paralelas: el mundo de los señores y el mundo de los criados.
Plasma a
los personajes de las clases altas (Calisto, Melibea, los padres de Melibea..),
de las clases bajas (las prostitutas Elicia y Areúsa, el rufián Centurio…) y a
la intermediaria entre ambos mundos (Celestina).
La figura central de la obra, Celestina,
es el nexo de unión entre ambos mundos. Su importancia es tal que con el tiempo
dará título a la obra. Físicamente es barbuda, arrugada, con un rasguño en la
cara en el que algunos reconocen la marca del diablo. Es el arquetipo de
alcahueta (cuyo antecedente literario es la vieja Trotacoventos del Libro de
Buen Amor), aunque ha desempeñado variados oficios: puta vieja, hechicera,
componedora de virgos, lavandera, perfumera…En ella destaca su vitalidad, su
capacidad de persuasión que la lleva a conseguir lo que desea de los demás, y
su codicia, que le causará la muerte.
En
el mundo de los señores se sitúan los dos amantes, Calisto y Melibea,
así como los padres de esta, Alisa y Pleberio.
Calisto
se caracteriza por su egoísmo, es un ser al que solo mueven sus deseos .Calisto
representa el amor cortés parodiado, que transgrede las normas de este código
al buscar una intermediaria y no ser discreto sobre su relación; es una figura
antiheroica y por ello no puede tener muerte heroica.
Melibea.
El personaje de la joven Melibea sufre un cambio . Profundamente humana, al
principio rechaza con violencia las insinuaciones del joven galán; luego duda,
vacila y, finalmente, se entrega a él sin reparos. El rechazo de Calisto en la
primera escena se circunscribe en las coordenadas de lo prescrito por el amor
cortés. Su entrega posterior es debido a que la joven es víctima del conjuro de
Celestina, con lo que cristianamente quedaría libre de culpa. Para otros, la
alcahueta hace que descubra su amor por Calisto solo con la palabra. Cuando el
objeto de su amor muere Melibea se suicida. En Melibea no se advierte
arrepentimiento, ni siquiera tiene conciencia de pecado al suicidarse, sólo lamenta
no haber disfrutado más de ese amor y lamenta el dolor que causará a sus
padres.
Los
padres de Melibea: Alisa es una gran señora orgullosa y altiva, pero
insensata. Pleberio no representa los rasgos habituales de la figura
paternal en la literatura española, no es autoritario (es solícito, tierno y
cariñoso con su hija) ni se lamenta por el honor perdido. Por el contrario, en
un extenso monólogo al final de la obra, acusa al amor de ser el culpable de
todo.
En el mundo de los criados encontramos tres parejas: los criados de Calisto (Pármeno,
Sempronio y, tras su muerte, Tristán y Sosia) y las prostitutas Arúsa y Elicia.
Sempronio pone en contacto a Calisto y a Celestina, y desde el principio, busca
su propio beneficio. Pármeno es el criado fiel que irá cambiando de actitud
para unirse a Sempronio. Areúsa y Elicia se caracterizan por su relación con
Celestina. Mucho más independiente en el caso de la segunda. Ambas odian a
Melibea y buscan vengarse de Calisto. Otros personajes secundarios, además de los
mencionados Tristán y Sosia, son Lucrecia, la criada de Melibea, y Centurio, el
cobarde soldado contratado por las prostitutas para llevar a cabo su venganza.
Se trata de un personaje tomado de “miles gloriosus” de la comedia clásica.
3.6. Estilo
Los dos mundos representados, la clase alta y la clase baja, están retratados al mínimo detalle.Reflejandos
niveles estilísticos: el nivel o registro culto y el nivel popular,
respectivamente. Sin embargo, el acierto de la obra también reside en
que Celestina, por ejemplo, astuta y sabia, es capaz de cambiar de
registro si la situación lo requiere
- El registro culto está representado por los siguientes personajes: Calisto y Melibea y por los padres de esta. El registro popular está representado por Celestina, los criados, las prostitutas.
- El registro culto presenta las siguientes características lingüísticas: cultismos, alusiones mitológicas, sintasis latina, sentencias de personajes ilustres (poeta Petrarca...), arcaísmos (palabras o expresiones que hoy están en desuso).El registro popular presenta las siguientes características lingüísticas: intervenciones breves y rápidas propias de la conversación entre personajes de igual condición social, con frases de tono apelativo y expresivo, a veces suspendidas y cortadas, con refranes, frases hechas, lenguaje de germanía, localismos y dialectalismos.
- El registro culto emplea recursos estilísticos o figuras literarias como:antítesis propias de la antonimia amorosa, extensas enumeraciones, interrogaciones retóricas,hipérbaton (alteración en el orden de las palabras). El registro popular emplea figuras literarias como: exclamaciones, repeticiones, anáforas….La abundancia de refranes contribuye a la comicidad de la obra a la vez que es útil para establecer un vínculo emocional con el público por el reconocimiento de la sabiduría que contienen.
3.7. Temas
En La Celestina aparecen varios
temas de fondo.En primer lugar, tenemos el tema
del amor, tratado como una pasión incontenible con un fuerte componente
de deseo sexual, que hace que los protagonistas
se olviden de la moral y que acaba destruyéndolos como una especie de
castigo divino.
En segundo lugar, se encuentra el
tema de la codicia. Se trata de otra pasión que arrebata a algunos
personajes. Todos los que no pertenecen a la clase social alta actúan por
motivaciones de tipo económico, es decir, por conseguir dinero y riqueza.
En tercer lugar, también aparece
el tema de la muerte, presentada no como el paso necesario para alcanzar
la vida eterna (como en la literatura medieval), sino como el final absurdo de
la existencia, al que lleva el desorden moral.
3.8. Sentido
Fernando de Rojas parodió con esta obra la ideología del amor cortés, y así Calisto es una parodia del vasallo enamorado. Un caballero, según la ideología del amor cortés no puede decir el nombre de su amada, no puede clamar en voz alta quién es el objeto de su amor (Calisto se lo cuenta a Pármeno, Sempronio, la astuta Celestina...), no puede buscar intermediaria, no puede fijar un encuentro amoroso, etc. Por lo tanto, al transgredirse las normas o convenciones del amor cortés, Fernando de Rojas tuvo que buscar un castigo para los personajes. Los personajes mueren por sus actos.
El autor también avisa del peligro de las alcahuetas y falsos criados.Por otra parte, La Celestina refleja muy bien el espíritu de su época
, poniendo al descubierto los valores del capitalismo burgués que se
abría paso: individualismo, aprecio del dinero, actitud materialista,
mentalidad práctica, enfrentamiento de clases sociales…